Internet no es una moda pasajera, la red no se va a achicar y, mucho menos a desaparecer.
Los cambios que esta ha provocado aún no se han podido dimensionar en todo su potencial, pero si algo se puede percibir es el proceso disruptivo que ha generado en algunas industrias.
En primer momento fue el negocio de la música y algunas grandes empresas que aún luchan por no adaptarse y pretenden que el mercado, el público, en fin, los seres humanos, sigan comportándose como ellos desean y se muevan dentro de su zona de confort.
Alguien se llevo su queso y muchos no quieren darse cuenta de eso.

Otro negocio que cae por el proceso disruptivo que produce Internet es el de la televisión.
Lamento decirles que el negocio de la TV tal cual lo conocemos va caer en picada abrupta, es más, ya ha comenzado el descenso.
El dinero de la publicidad se está yendo hacia Internet y, esto no es por capricho de los anunciantes, es porque hacia allí se están yendo las personas.
Las consultoras de publicidad en los Estados Unidos esperan que la totalidad de ingresos por este concepto aumenten 2.7% a U$S169,5 mil millones en 2015, pero para la televisión una reducción de 1,4% y en los medios digitales un incremento de hasta 15,5%. También esperan una caída del 8,2% para los periódicos, de 9,4% para las revistas y, del 1,2% de descenso para la radio.
La audiencia de contenidos audiovisuales no desaparece, simplemente ven sus programas preferidos en línea.
Lo mismo que se ve en un canal de televisión se puede ver en los celulares o en las tablets, o a través de una consola de video juegos, o en un navegador web.
O simplemente en la pantalla LED de la televisión con un dispositivo HDMI del tamaño de un dedo pulgar.
Siempre a través de la red de redes.
Las personas ven una película, una serie, un partido de fútbol, lo que les llame la atención, una buena producción, buena calidad, y la ven en cualquier pantalla, a través de lo que les llegue, ya no son dependientes del horario, ni se preocupan por las tandas, ni por los caprichos de ninguna cadena de televisión.
Y esto va a ir en aumento….
Los cambios que esta ha provocado aún no se han podido dimensionar en todo su potencial, pero si algo se puede percibir es el proceso disruptivo que ha generado en algunas industrias.
En primer momento fue el negocio de la música y algunas grandes empresas que aún luchan por no adaptarse y pretenden que el mercado, el público, en fin, los seres humanos, sigan comportándose como ellos desean y se muevan dentro de su zona de confort.
Alguien se llevo su queso y muchos no quieren darse cuenta de eso.

Otro negocio que cae por el proceso disruptivo que produce Internet es el de la televisión.
Lamento decirles que el negocio de la TV tal cual lo conocemos va caer en picada abrupta, es más, ya ha comenzado el descenso.
El dinero de la publicidad se está yendo hacia Internet y, esto no es por capricho de los anunciantes, es porque hacia allí se están yendo las personas.
Las consultoras de publicidad en los Estados Unidos esperan que la totalidad de ingresos por este concepto aumenten 2.7% a U$S169,5 mil millones en 2015, pero para la televisión una reducción de 1,4% y en los medios digitales un incremento de hasta 15,5%. También esperan una caída del 8,2% para los periódicos, de 9,4% para las revistas y, del 1,2% de descenso para la radio.
La audiencia de contenidos audiovisuales no desaparece, simplemente ven sus programas preferidos en línea.
Lo mismo que se ve en un canal de televisión se puede ver en los celulares o en las tablets, o a través de una consola de video juegos, o en un navegador web.
O simplemente en la pantalla LED de la televisión con un dispositivo HDMI del tamaño de un dedo pulgar.
Siempre a través de la red de redes.
El queso despareció… ya no está en ese deposito. Y como enseña esta parábola:
- Cambia. Muévete con el Queso Si no cambias, te puedes
extinguir.
- El movimiento hacia una nueva dirección te ayuda a encontrar
Queso Nuevo.
- Las viejas convicciones no te conducen a Queso Nuevo.
Y esto va a ir en aumento….